Omnia vincit amor: equilibrios y acuerdos de un amor italoboliviano.
Acerca de las relaciones, creo que no hay nada dicho, y que es precisamente esto lo que nos lleva a buscar el amor de distintas maneras, y en mi caso en otro país.
Como ya conté en otro artículo (México me cambio la vida) conocí a mi esposo en México, pero esa fue la parte mas sencilla. Mientras mantuvimos la relación a distancia, ambos tuvimos que integrarnos de alguna manera a la realidad del otro, que desconocíamos por completo antes de conocernos. El jamás había estado en Bolivia y yo no había estado en Italia, aunque él fue el primero en cruzar el océano para poder pasar un poco de tiempo juntos, el tiempo que estuvo en mi país fue muy poco para poder realmente hacerse una idea de mi cultura y tradiciones. En mi caso no fue diferente la primera que vez que estuve en Italia, el tiempo paso tan rápido que tampoco tuve tiempo de interiorizar en la cultura italiana. Aunque luego nuestras estadías se fueron alargando en nuestros respectivos países, jamás es igual que vivir realmente en un lugar y tener que adoptar y aprender tantas cosas.
Una vez
que estuvimos casados, tuvimos que convivir con nuestras diferencias, y aprender a conciliar ciertas cosas para poder crear un equilibrio donde ambos nos sintiéramos
cómodos.
Una pregunta
que me hacen mucho, y que creo que surge espontanea, es: ¿En qué idioma hablan?
La respuesta es mas sencilla de lo que se cree, pues hablamos en el idioma que queremos,
a veces en español otras en italiano, con el tiempo el ha aprendido algunas palabras
que uso como paceña como: K’encha que quiere decir malagüero o chacra que
quiere decir poco capaz, o churra que quiere decir bonita. Y por mi parte he
aprendido palabras en su dialecto, que al inicio era completamente incapaz de
entender. En casa no hay reglas de hablar un idioma o el otro, lo importante es
entendernos, si a causa del idioma surgen incomprensiones intentamos comunicarnos
en el idioma del otro, para estar seguros de que estamos hablando de la misma
cosa, ya que algunas palabras pueden tener otro significado o un peso diferente
en ambos idiomas. Lo importante es hacer entender a la otra persona esta
particularidad, para evitar malentendidos.
Acerca de
costumbres o tradiciones, mas allá de ser o no de nuestros países, para
nosotros es importante si es importante para la otra persona. Por ejemplo, el
día de muertos o todos santos, es una costumbre inexistente en Italia, pero se
ha instaurado en mi casa, porque es importante para mí, y él la ha asimilado también
como una tradición suya. Hacemos bromas con las “alasitas” o la fiesta de la
miniatura, por ejemplo, cuando vemos un auto que nos gusta, nos decimos “lo vamos
a comprar en alasitas” y cosas de ese tipo. Aquí, al sur, la pascua por ejemplo
esta muy identificada por ciertos alimentos, sobre todo tartas y pasteles que
he aprendido a hacer para esas fechas, y que a mi también me encantan. Lo importante
para poder asimilar las costumbres y tradiciones es entenderlas y explicarlas, en
modo de que tu pareja entienda el porque y pueda involucrarse de manera
personal, así las tradiciones dejan de ser solo de uno, y pasan a ser de la
familia. Poco a poco se llega a crear una nueva “nación” donde puede hablarse
el idioma que sea, donde la comida típica puede ser una mezcla de ambas gastronomías,
y donde sean ambos, por igual, quienes decidan las reglas.
Ohhh que lindo!! ❤️❤️
ResponderBorrarMe encantó! La verdad no me había hecho la pregunta de en qué idioma hablan, pero ahora que lo cuentas me sorprendió.